¡Filosofía IBERO de fiesta! Celebra también 80 años

¡Filosofía IBERO de fiesta! Celebra también 80 años

El Rector, Dr. Luis Arriaga Valenzuela, destaca la importancia que tienen las humanidades actualmente, pues considera que en el mundo están aconteciendo hechos que formulan nuevos retos e incógnitas

El Dr. Francisco Castro Merrifield, director del Departamento de Filosofía, advirtió que su énfasis no es historicista, sino que se enfoca en analizar problemas del presente desde rigurosas metodologías de razonamiento.

En el marco del 80 aniversario de la Universidad Iberoamericana Ciudad de México (IBERO), el rector Luis Arriaga Valenzuela, S.J., destacó el compromiso que esta institución ha tenido con las humanidades desde su creación en 1943.

Durante el desayuno organizado por el Departamento de Filosofía, junto con la coordinación del 80 Aniversario de la IBERO, el Dr. Arriaga recordó que “la creación del Centro Cultural Universitario solo cobró sentido cuando un pequeño grupo de estudiantes y profesores se reunió en esta casa de la avenida Hidalgo para comprometerse con el estudio de la filosofía”.

Asimismo, el Rector destacó que el trabajo de la Compañía de Jesús por impulsar el diálogo filosófico que se impartía en las aulas del Colegio Grande de San Idelfonso desde mediados del siglo XVII, fue relevante para que pudiera llegar a los pasillos de la IBERO de manera más efectiva.

Habló además sobre la importancia que tienen las humanidades actualmente, pues consideró que en el mundo están aconteciendo hechos que formulan nuevos retos e incógnitas para la filosofía.

“Vivimos a la sombra de un momento geopolítico desafiante, no solo se trata del retorno de la guerra, o de la magnitud de la emergencia climática, sino del desarrollo de tecnologías emergentes que en campos tan complejos como los de la biotecnología, el procesamiento masivo de datos o la Inteligencia Artificial, plantean preguntas éticas que a todas y a todos nos conciernen.

De la misma forma, el Dr. Luis Arriaga resaltó el trabajo que hace la IBERO por impartir de manera adecuada las Humanidades, pues consideró que gracias a ellas se crea una ciudadanía “verdaderamente democrática“.

“No es una coincidencia que estas preocupaciones sean consideradas recurrentemente en los distintos números de la Revista de Filosofía de la Universidad Iberoamericana, publicación que es un referente de nuestra casa de estudios de la que nos sentimos de verdad profundamente orgullosos y orgullosas “, mencionó.

Por otra parte, despejó ciertos “rumores” sobre el futuro del Departamento. Aseguró que en la IBERO siempre habrá espacio para las carreras de Humanidades, e hizo un llamado a la comunidad para que se mantuvieran tranquilos. “Aprovecho la ocasión para refrendar la certidumbre de que la IBERO no perderá –ni ahora ni nunca– su identidad humanística. Sé que recientemente se han difundido algunos rumores sobre un posible cierre de las carreras de humanidades en la IBERO. Y quiero que estén profundamente tranquilos al respecto, por si a alguien le quita el sueño. Eso no va a pasar”, sentenció.

Señaló que es gracias a la mirada humanista que tiene la IBERO que su comunidad siempre se ha caracterizado por enriquecer el debate público en México. Y aseguró que en caso de descuidar las humanidades se correría el riesgo de formar estudiantes “carentes de empatía, juicio crítico y conciencia histórica”.

“La formación en humanidades nos brinda herramientas para cuestionar las estructuras del poder, analizar críticamente la información, y comprometernos con un diálogo constructivo. Habilidades que son esenciales para una ciudadanía activa, capaz de contribuir al bienestar de la sociedad en su conjunto. Como Rector, como Jesuita formado en Teología y Filosofía Social, lo tengo claro”, afirmó el Dr. Luis Arriaga.

Para finalizar, agradeció al Departamento de Filosofía por la pasión y compromiso que ha demostrado con la comunidad a través de estos 80 años.

“Un Departamento que siempre ha sido espacio propicio para celebrar el pensamiento y el lugar de encuentro para las mentes más lúcidas de cada generación. Hoy celebramos y reiteramos que la IBERO quiere seguir siendo su casa, pues esta comunidad universitaria que somos les quiere, pero también les requiere. Muchísimas gracias”, concluyó el Rector.

Por su parte, el Dr. Francisco Castro Merrifield, director del Departamento de Filosofía, agradeció a las autoridades la IBERO por reconocer el trabajo y esfuerzo que llevan haciendo por tantos años. Destacó que a pesar de cumplir 80 años, la Filosofía en nuestra Institución siempre será necesaria para la comunidad, pues aseguró que siempre surgirán nuevos retos y temas que tratar.

“Nuestros programas académicos cultivan la tradición, no como reliquias a conservar y perpetuar, sino como herramientas para observar el presente. Nuestro énfasis no es historicista, sino que se enfoca en analizar problemas del presente desde rigurosas metodologías de razonamiento crítico, argumental e interdisciplinario”, subrayó el académico.

El Dr. Francisco aseguró que el Departamento de Filosofía continuará trabajando para poder reflexionar “no tanto en cómo la universidad puede adecuarse a los cambios, sino en cómo puede ser una casa critica y de resistencia frente a los cambios que amenazan nuestra existencia”.

El Dr. José Luis Villacañas Berianga, catedrático de Filosofía en la Universidad Complutense de Madrid, opinó que la filosofía busca trascender más allá del presente, pues dijo que las ideas y reflexiones que van surgiendo a través del dialogo filosófico pueden tener relevancia en diferentes contextos históricos.

“Ahora hablo yo, pero quisiera hablar desde la perspectiva de un yo que contempla la historia con la mirada de eso que se llamó espíritu. Pero al mismo tiempo estoy hablando yo, un humilde profesor español, aquí, en un momento importante de nuestra historia cultural, ahora, celebrando los ochenta años del Instituto de Filosofía”, declaró.

Para finalizar, el invitado Luis Villacañas añadió que la búsqueda de la verdad es parte fundamental de la filosofía, por lo que no puede limitarse a “diagnosticar el presente, a identificar el mal, a curarnos de nuestro sufrimiento ¿Qué valor tendría esto si no albergara una verdad?”

FUENTE: ibero

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