Desde 2017 la realidad cambió para los alumnos deportistas de excelencia de la Universidad Nacional Autónoma de México, con la instrumentación y consolidación del Programa de becas para alumnos deportistas de equipos representativos de la UNAM, que a la fecha ha brindado 12 mil 591 entregas de este beneficio, un bálsamo de ayuda en el desafiante transitar del atleta estudiante por las competencias y aulas.
Después de 13 ediciones (una por semestre con excepción de 2017 que fue anual) el impacto en la vida de los alumnos deportistas auriazules de élite es satisfactorio, toda vez que se ha llegado a demostrar una correlación directa entre las becas recibidas por deportistas de alto rendimiento y el mejoramiento de su desempeño deportivo y su promedio académico, que al inicio del programa mostraba un comportamiento general de 7.9 y en sus más recientes promociones ronda el 9.0 de calificación. Referido por los mismos beneficiados, el apoyo brinda tranquilidad, da herramientas para mejorar el desempeño y hace la diferencia en momentos puntuales durante las competencias deportivas, cuando la mentalidad es feroz, y en las aulas, cuando la base es el aprendizaje y la sapiencia.
“La beca te da cierta tranquilidad, te quita una preocupación de encima, y al final de cuentas te ayuda a concentrarte en tus actividades deportivas y académicas”, afirma Carlos Javier Rojas López, alumno de la Escuela Nacional de Estudios Superiores (ENES) campus Juriquilla, y atleta de tiro con arco que ha sido medallista por la UNAM en dos ediciones de Universiada Nacional, además de haber logrado medalla de plata en los Juegos Panamericanos de Santiago, Chile, 2023.
Desde su nacimiento, en un hecho sin precedentes en la historia del deporte auriazul, este programa de becas ha permitido dispersar cerca de 78 millones de pesos a alumnos deportistas de excelencia. Lo anterior gracias a los recursos económicos generados por el Programa de Vinculación con los Egresados de la UNAM y el acompañamiento operativo de la Dirección General de Orientación y Atención Educativa.
En ese sentido, Mariana Palacios Rodríguez, egresada de la Facultad de Economía, exintegrante del equipo representativo de voleibol de sala femenil de la UNAM y un ejemplo de eficiencia terminal de este programa de becas, ya que actualmente ejerce con éxito su carrera académica y estudia una maestría, sin dejar de entrenar en el gimnasio, coincide en que “la beca ayuda muchísimo en implementos para nuestro deporte, como tenis o rodilleras. Siendo estudiante, ese monto que recibes sí hace la diferencia”.
Por su parte, Carlos Rojas es un atleta de alto rendimiento que ha representado a México en competencias internacionales, además de ser un alumno destacado con 9.58 de promedio académico en la carrera de ciencias genómicas, la cual requiere un perfil específico, orientado a la investigación científica. Rojas López, con la beca deportiva universitaria, emplea el apoyo económico en accesorios de su disciplina deportiva y en transporte.
“Para lo que más he ocupado esta beca es para material deportivo. En tiro con arco hay muchos aditamentos que necesitamos, por lo que este incentivo nos ayuda bastante para cubrir estos gastos. También la uso para el transporte, ya que el campus me queda a unos 10 kilómetros de distancia de mi hogar”, detalla el arquero universitario.
FUENTE: enfoquenoticias