Dichos libros, cartas y documentos necesitan ser investigados, señala la Mtra. Teresa Matabuena, directora de la BFXC.
Este 2023 la Universidad Iberoamericana Ciudad de México celebra su octogésimo aniversario, por lo que su Departamento de Historia organizó el ciclo ’80 años de la IBERO. 80 libros de la Compañía de Jesús’, conformado por 12 mesas redondas, a lo largo de un año, en las que se re-presenta este acervo.
En la Mesa 1 de este ciclo se habló, entre otros temas, de los ‘Ejercicios espirituales y otros documentos de la Biblioteca Francisco Xavier Clavigero’, lo cual estuvo a cargo de la Mtra. Teresa Matabuena Peláez, directora de la BFXC.
Detalló que la biblioteca cuenta con 8 mil libros sobre los jesuitas o escritos por ellos entre los siglos XVI y XIX. El origen de este fondo son las bibliotecas jesuitas virreinales (el sello de fuego de algunas de éstas, como el del Colegio de San Ildefonso, aparece en 61 ejemplares) y las bibliotecas de unos centros culturales que tenía la Compañía de Jesús en México.
El acervo también cuenta con 89 documentos originales, de los siglos XVII y XVIII, que forman la ‘Colección de Manuscritos de la Antigua Provincia de la Compañía de Jesús en México’. En estos papeles se tratan varios temas, como el trabajo pastoral o ministerial, las relaciones con la Provincia de Filipinas, la evangelización de las personas indígenas del noroeste del virreinato novohispano, etcétera.
Escritos en diferentes idiomas, entre ellos latín, español, francés, inglés y lenguas indígenas, los libros abordan múltiples temáticas: religión -sermones y los Ejercicios Espirituales-, arquitectura, biografías, la historia de México y la historia de la Compañía.
Uno de esos libros lleva por título: ‘Cartas edificantes, y curiosas, escritas de las missiones estrangeras, y de Levante’, y en éste, los misioneros jesuitas franceses narraron a las autoridades en Roma sus viajes a tierras lejanas donde, por ejemplo, observaron las costumbres de los grupos indígenas,
El fondo cuenta además con una colección de tarjetas postales de casas, colegios y construcciones de la Compañía en México y en el mundo; y cerca de 100 cartas originales de los siglos XVII y XVIII, en las que los jesuitas mexicanos narraron a los provinciales cómo era la vida en las misiones (en una de las misivas aparece la firma del célebre Padre Kino, civilizador de Sonora y explorador de Arizona).
Asimismo, hay documentos bastante curiosos, como uno donde se describen las fiestas -con jaripeos y cuetes incluidos- que hizo la población de Durango al enterarse que se iba a hacer santo a Ignacio de Loyola, fundador de la Compañía de Jesús.
El acervo, consideró Matabuena, necesita ser investigado por quienes estén interesados/as en la historia de la Compañía y en saber cómo estudiaban los jesuitas, quiénes eran sus fuentes y de dónde sacaban sus ideas.
Finalmente, la Directora de la BFXC recordó que San Ignacio fomentó en la Compañía la lectura y la escritura de las experiencias vividas a lo largo y ancho del mundo, por lo que en el transcurso de la historia miles de jesuitas “han tomado la pluma para dejar testimonio de su vida y su trabajo pastoral, humanista y científico a lo largo y ancho del mundo”. En sus escritos quedó para la posteridad que cultivaron las ciencias y las artes, y dejaron memorias de usos, costumbres y ciencias de los lugares a donde llegaron.
FUENTE: ibero.mx