• De 2007 a la fecha egresaron de 10 carreras universitarias
• Luis Daniel Velasco Mata fue el alumno más destacado; imparte clases de matemáticas e inglés y desea estudiar una maestría. “Sí se puede lograr algo más, aun estando aquí”
“Cuando llegué aquí, realmente pensé que todo estaba perdido”, relata Luis Daniel Velasco Mata, al referirse al momento en que ingresó al Centro Varonil de Reinserción Social (CEVARESO), de Santa Martha Acatitla, el 29 de octubre de 2021.
Fue detenido por delitos menores y sentenciado a cuatro años de prisión. Sin embargo, motivado por acceder al beneficio de la liberación anticipada -que se otorga a quienes continúan sus estudios en prisión- se inscribió en el centro escolar “Valentín Campa Salazar”.
Ahí se les brinda la posibilidad de adquirir conocimientos y habilidades técnicas para su desempeño en actividades productivas que lleven a cabo durante su reclusión y, posteriormente, en libertad.
El trabajo dentro de los establecimientos penitenciarios tiene como propósito prepararlos para su integración o reintegración al mercado laboral, una vez liberados.
Y aunque para Luis Daniel el primer objetivo era ese, encontró una posibilidad que había dejado en el olvido: titularse. Antes de estar preso estudiaba la carrera de ingeniero civil en la UNAM, pero en 2018 abandonó sus estudios por problemas con el consumo de alcohol.
“Cuando ingresé aquí ya nada más debía dos materias para terminar con los créditos de mi historial académico, ya había hecho todos los trámites de titulación, del servicio social, el diplomado y examen de inglés”, relató Velasco Mata.
Las autoridades del CEVARESO al ver el avance de los créditos que tenía, lo apoyaron para que pudiera concluir las materias que le faltaban e iniciar los trámites de titulación, algo que para él era inimaginable: “toda mi carrera fue algo difícil desde el principio; escoger ingeniería realmente fue un reto para mí, porque nadie de mi familia había estudiado ingeniería”, aseguró.
Se dio a la tarea de realizar dos proyectos para que calificaran las materias de Cimentaciones y Obras Hidráulicas, las cuales aprobó con 9 y 7, respectivamente. “Si yo hubiera seguido el camino que llevaba, ya estaría muerto, estaba cayendo y no me daba cuenta. Aquí descubrí mi carácter y sé qué camino debo seguir”, refirió.
El proceso para aprobar las materias lo inició en enero de 2022 luego de inscribirse en el centro escolar, retomó el programa de estas y, posteriormente, entregó un trabajo final para cada una. “Las autoridades me apoyaron con los materiales necesarios y presenté los trabajos con los recursos que aquí tengo”, explicó.
Su esfuerzo lo llevó a ser el alumno más destacado del ciclo escolar 2021-2022. El pasado 9 de septiembre, gracias al respaldo de la Facultad de Ingeniería de la UNAM y de las autoridades penitenciarias, Luis Daniel rindió protesta -desde prisión- como ingeniero civil. Me siento muy feliz por haberlo logrado y espero que sea una motivación para mis compañeros que viven aquí en reclusión; mi objetivo es demostrarles que sí se puede lograr algo más aun estando aquí, y podemos tener una vida digna, externó.
Con él suman 14 personas que se titulan por la Universidad Nacional en centros penitenciarios de la Ciudad de México, de 2007 a la fecha, en las carreras de Ciencias de la Comunicación, Arquitectura, Derecho, Odontología, Ciencias Biológicas, Psicología, Economía, Actuaría; Ingeniería Química Metalúrgica, así como Ingeniería Civil.
Actualmente imparte clases a nivel bachillerato de Matemáticas e inglés a sus compañeros, dos veces por semana. Con el grado obtenido, Luis Daniel espera reducir su condena a un año y al salir cursar una maestría, además de ejercer como ingeniero civil en el área de sistemas de transportes.
“Lo único que puedo decir es que lo haré lo mejor posible; muchas gracias por haberme acompañado en este momento tan importante en mi vida. Siempre llevaré en mi mente y en mi corazón que Por mi raza hablará el espíritu”, expresó durante la ceremonia de toma de protesta que se llevó a cabo en el auditorio al aire libre del CEVARESO.
FUENTE: dgcs.unam